la evolucion del hombre

australophitecus

El origen del australopiteco se remonta a aproximadamente cuatro millones de años, en África, especialmente en aquellas zonas de clima tropical y su desaparición física se produjo alrededor de dos millones de años atrás.

Entre las características más relevantes que aportó este género se destacó su desplazamiento bípedo, es decir, disponían de dos pies que les permitían la movilidad y caminar erguidos como lo hacemos los humanos de hoy.

Respecto de su cerebro el tamaño era similar al de los simios de la actualidad y en relación a los humanos modernos disponía de un 35 % del tamaño.

En la contextura física se distinguían la delgadez y la pequeñez, presentando un pronunciado dimorfismo sexual que implicó un tamaño mucho más importante en el caso de los machos, siendo las hembras aún más pequeñas.

Su alimentación era a base de hojas y de frutas.

Existen diferentes especies dentro de la rama australopiteco: el afarenis, el anamensis, el bahrelghazali, el africanus, el garhi y el sediba, éste último sobresale especialmente de entre todos porque sería el australopiteco más reciente históricamente hablando, por tanto, se erige como uno de los antepasados más directos del ser humano de hoy.

homo habilis

Subtema

Symbol question.svg Homo habilis

Rango temporal: Pleistoceno inferior - medio

PreЄЄOSDCPTJKPgN

Homo habilis-KNM ER 1813.jpg

KNM ER 1813 descubierto en Koobi Fora, Kenia

Estado de conservación

Status iucn3.1 EX es.svg

Taxonomía

Reino: Animalia

Filo: Chordata

Subfilo: Vertebrata

Clase: Mammalia

Orden: Primates

Suborden: Haplorrhini

Infraorden: Simiiformes

Superfamilia: Hominoidea

Familia: Hominidae

Género: Homo

Especie: H. habilis†

Leakey, L.S.B., Tobias y Napier, 19641​

[editar datos en Wikidata]

Reconstrucción de un habilis manejando una piedra con filo.

Homo habilis (del latín homo, 'hombre', y habilis, 'hábil') es un homínido extinto que vivió en África, en las edades Gelasiense y Calabriense (principios y mediados del Pleistoceno), 2,4 millones de años atrás. El descubrimiento de esta especie se debe a Mary y Louis Leakey, quienes encontraron los fósiles en Tanzania, África, entre 1962 y 1964. Cuando fue descubierto se le consideró como la especie más antigua del género Homo, puesto ocupado después por H. rudolfensis.

Su nombre significa «hombre hábil» y hace referencia al hallazgo de instrumentos líticos probablemente confeccionados por éste. Se han realizado estudios detallados de los restos óseos de sus manos para verificar si realmente sería posible que este Homo los hubiera realizado. Los científicos concluyeron que era capaz de prensión de agarre para realizar las manipulaciones necesarias en la fabricación de utensilios de piedra; probablemente, era carnívoro oportunista, es decir, carroñero, pero es un extremo que no sabemos aún.

Se observa en ellos un importante incremento en el tamaño cerebral con respecto a Australopithecus, que se ha calculado entre 510 cm³ (de KNM-ER 1813) y 600 cm³ (de OH 24).2​3​

La mayor parte de los restos ha sido hallada en Kenia, en la localidad de Koobi Fora, y en Tanzania, en la conocida Garganta de Olduvai.

Algunos autores4​ ponen en duda su pertenencia a Homo, conforme a una interpretación restrictiva de la diagnosis del género, y lo asignan o bien a Australopithecus o bien proponen que se defina un nuevo género para esta especie en el que se incluya también a Homo rudolfensis.

homo neardentales

Symbol question.svg Hombre de Neandertal

Rango temporal: 0,23 Ma-0,028 Ma

PreЄЄOSDCPTJKPgN

Pleistoceno (Ioniense-Tarantiense)

Neanderthalensis.jpg

Reconstrucción de un esqueleto de neandertal.

Estado de conservación

Extinto en época prehistórica desde ca. 28000 a. C.

Taxonomía

Dominio: Eucarya

Reino: Animalia

Subreino: Eumetazoa

Superfilo: Deuterostomia

Filo: Chordata

Subfilo: Vertebrata

Infrafilo: Gnathostomata

Superclase: Tetrapoda

Clase: Mammalia

Subclase: Theria

Infraclase: Placentalia

Superorden: Euarchontoglires

Granorden: Euarchonta

Orden: Primates

Suborden: Haplorrhini

Infraorden: Simiiformes

Superfamilia: Hominoidea

Familia: Hominidae

Subfamilia: Homininae

Tribu: Hominini

Subtribu: Hominina

Género: Homo

Especie: H. neanderthalensis / H. sapiens

Subespecie: ?Homo sapiens neanderthalensis

Campbell, 1963

Distribución

Área de distribución máxima de H. s. neanderthalensis.

Área de distribución máxima de H. s. neanderthalensis.

[editar datos en Wikidata]

El hombre de Neandertal (Homo sapiens neanderthalensis u Homo neanderthalensis) es una especie extinta del género Homo que habitó Europa, Próximo Oriente y Medio y Asia Central hace, aproximadamente, entre 230 000 y 28 000 años, durante el final del Pleistoceno medio y casi todo el superior. Cuando tuvo lugar su descubrimiento, se le nombró Homo neanderthalensis, y fue clasificado como una especie distinta del Homo sapiens. No obstante, algunos autores lo consideran como una subespecie de Homo sapiens1​, y se suele referir a dicha subespecie como Homo sapiens neanderthalensis, tal como indica la taxonomía.2​ Los estudios paleogenéticos indican un origen común para el hombre moderno y el hombre de Neandertal, así como hibridaciones entre ambas variedades de homínido en, al menos, dos lugares y momentos diferentes: Próximo Oriente y Europa occidental. Anatómicamente, los neandertales eran más robustos que el hombre moderno, con un tórax y cadera anchos y extremidades cortas. El cráneo se caracteriza por su doble arco superciliar, frente huidiza, la ausencia de mentón y una capacidad craneal media más grande que la de Homo sapiens sapiens. Los estudios anatómicos señalan la posibilidad de que tuvieran un lenguaje articulado.

El tipo de herramientas líticas que se han encontrado, y a las que se les asocia, se adscriben a la denominada cultura Musteriense, característica del Paleolítico medio. En los últimos años de existencia de los neandertales, aparecen en el registro arqueológico herramientas diferentes que se incluyen en la cultura Châtelperroniense, que algunos autores atribuyen al Homo sapiens neanderthalensis. Los neandertales eran omnívoros y explotaban una amplia variedad de alimentos pesqueros, mariscos, vegetales, etc.

Se desconocen las causas exactas de su extinción. Las hipótesis consideradas guardan relación con la expansión del Homo sapiens sapiens en Eurasia, así como por los cambios climáticos.

homo erectus

Es posible reconocer, dentro de este género, a diversas especies ya extintas. Una de ellas es el Homo erectus, que vivió entre 1,8 millones y 300.000 años antes de la actualidad, en la época del Pleistoceno inferior y medio (era Cenozoica).

Los fósiles del Homo erectus fueron hallados en la región de Asia oriental, en países como China e Indonesia. Otros fósiles similares fueron encontrados en África y en Europa, aunque finalmente los científicos se decantaron por incluirlos en otras especies.

El Homo erectus era robusto y podía medir hasta 1,80 metros. Contaba con una mandíbula fuerte aunque sin mentón, dientes pequeños y un volumen craneal que creció a lo largo de la historia de la especie hasta alcanzar los 1.200 centímetros cúbicos.

Se cree que el Homo erectus ya dominaba el fuego. Esta especie también contaba con la capacidad de desarrollar herramientas como martillos, cuchillos, yunques y cavadores, hechos con piedras y huesos.

Es posible reconocer diversas subespecies dentro del Homo erectus, como el Homo erectus pekinensis (“Hombre de Pekín”), el Homo erectus erectus (“Hombre de Java”) y el Homo erectus soloensis (“Hombre de Solo”).

Los científicos aún se debaten sobre si el Homo erectus es un antepasado directo del Homo sapiens (el ser humano moderno). Se cree incluso que las últimas poblaciones del Homo erectus convivieron con poblaciones del Homo sapiens.

La importancia del Homo erectus

Homo erectusUna de las principales características del Homo erectus fue su destreza a la hora de fabricar armas y herramientas, además del hecho de que caminaba con el cuerpo erguido y que tanto el volumen de su cerebro, como su estatura y su peso promedio los ubican muy cerca de nuestra especie desde un punto de vista fisiológico.

homo sapiens

4

Homo sapiens (del latín, homo ‘hombre’ y sapiens ‘sabio’) es una especie del orden de los primates perteneciente a la familia de los homínidos. También son conocidos bajo la denominación genérica de «hombres», aunque ese término es ambiguo y se usa también para referirse a los individuos de sexo masculino y, en particular, a los varones adultos.2​3​ Los seres humanos poseen capacidades mentales que les permiten inventar, aprender y utilizar estructuras lingüísticas complejas, lógicas, matemáticas, escritura, música, ciencia, y tecnología. Los humanos son animales sociales, capaces de concebir, transmitir y aprender conceptos totalmente abstractos.

Se consideran Homo sapiens de forma indiscutible a los que poseen tanto las características anatómica de las poblaciones humanas actuales como lo que se define como «comportamiento moderno». Los restos más antiguos de Homo sapiens se encuentran en Marruecos con 315 000 años.4​ La evidencia más antigua de comportamiento moderno son las de Pinnacle Point (Sudáfrica) con 165 000 años.

Pertenece al género Homo que fue más diversificado y, durante el último millón y medio de años incluía otras especies ya extintas. Desde la extinción del Homo neanderthalensis, hace 28 000 años, y del Homo floresiensis hace 12 000 años (debatible), el Homo sapiens es la única especie conocida del género Homo que aún perdura.

Hasta hace poco, la biología utilizaba un nombre trinomial —Homo sapiens sapiens— para esta especie, pero más recientemente se ha descartado el nexo filogenético entre el neandertal y la actual humanidad,5​ por lo que se usa exclusivamente el nombre binomial. Homo sapiens pertenece a una estirpe de primates, los hominoideos. Aunque el descubrimiento de Homo sapiens idaltu en 2003 haría necesario volver al sistema trinomial, la posición taxonómica de este último es aún incierta.6​ Evolutivamente se diferenció en África y de ese ancestro surgió la familia de la que forman parte los homínidos.

Filosóficamente, el ser humano se ha definido y redefinido a sí mismo de numerosas maneras a través de la historia, otorgándose de esta manera un propósito positivo o negativo respecto de su propia existencia. Existen diversos sistemas religiosos e ideales filosóficos que, de acuerdo a una diversa gama de culturas e ideales individuales, tienen como propósito y función responder algunas de esas interrogantes existenciales. Los seres humanos tienen la capacidad de ser conscientes de sí mismos, así como de su pasado; saben que tienen el poder de planear, transformar y realizar proyectos de diversos tipos. En función a esta capacidad, han creado diversos códigos morales y dogmas orientados directamente al manejo de estas capacidades. Además, pueden ser conscientes de responsabilidades y peligros provenientes de la naturaleza, así como de otros seres humanos.