TCA (Técnicas de conservación de alimentos)
Su principal función es:
alargar en el tiempo la vida útil de los alimentos, intentando preservar al máximo su calidad organoléptica y nutricional.
Su clasificación es:
FRÍO: Consiste en conservar los alimentos a una temperatura, entre 0 °C y 8 °C, cercana al punto de congelación.
Técnicas: Refrigeración, Congelación y Ultracongelación.
REFRIGERACIÓN: Proceso por medio del cual se consigue una disminución de la temperatura de fluidos o cuerpos en general. En particular se utiliza el proceso de conservación de mercancías perecederas incluso a temperaturas inferiores a -60ºC.
CONGELACIÓN: Proceso de transformación del agua en hielo por exposición a bajas temperaturas y se realiza en varias etapas.
ULTRACONGELACIÓN: Método de conservación de alimentos consistente en bajar la temperatura de la comida de forma mucho más rápida y potente de lo normal.
CALOR: procedimiento térmico a través del cual se somete a los productos a temperaturas elevadas durante el tiempo suficiente para conseguir la destrucción de los microorganismos contaminantes.
Técnicas: Pasteurización, Esterilización y Uperización.
Pasteurización: Se aplican temperaturas inferiores a 100ºC durante pocos segundos.
Esterilización: se aplican altas temperaturas (120ºC) durante un largo periodo de tiempo (20 minutos).
Uperización: (U.H.T.): se aplican altísimas temperaturas (140ºC) durante muy poco tiempo (2 segundos).
ADICIÓN DE ADITIVOS: Son sustancias que se añaden a los alimentos para mejorar su color, su textura, su sabor o, simplemente, para su conservación durante un período más largo de tiempo.
Técnicas: Salazón, liofilización y concentrado de azúcar.
Salazón: Método mediante el cual se adiciona sal a un alimento para eliminar su humedad y de esta forma se reduce el desarrollo de microorganismos, a excepción de halófilos y halo tolerantes. Encontramos la salmuera seca, en la que se trata de cubrir un producto con sal.
Liofilización: Técnica de conservación de alimentos basada en el desecado de determinados materiales por medio de la sublimación del agua contenida en éstos.
Concentrado de azúcar: Desempeña un papel antiséptico en la conservación de la fruta y de los alimentos en general. En altas concentraciones, el azúcar ejerce un efecto altamente osmótico, lo que se traduce en que los microorganismos no pueden sobrevivir.
Técnicas por adición de aditivos: Salazón, liofilización y concentrado de azúcar.
Salazón:
Jamón serrano, bacalao, aceitunas, arenques, etc.
Liofilización:
el café instantáneo, la leche evaporada, las patatas fritas de bolsa, las pastillas de caldo tipo Avecrem y los frutos secos: Preparados instantáneos como fideos, risottos y sopas en polvo.
Concentrado de azúcar:
El azúcar se utiliza como un aditivo natural y eficaz para la conservación de diferentes frutas en forma de conservas en almíbar, mermeladas, jaleas, etc.
Que son:
consiste en evitar el crecimiento de microorganismos u otros microorganismos, además de reducir la oxidación de las grasas que causan rancidez.
Factores que inciden en la conservación de los alimentos
Ejemplos que se les puede aplicar estas técnicas:
Técnicas por frío: Refrigeración, Congelación y Ultracongelación.
Refrigeración:
Cuando metemos unas sopas o guisos a la nevera, con verduras y carnes agregadas duran aproximadamente de 3 a 4 días si tiene una temperatura de 40°f o menos.
otro ejemplo sobras de comida pueden ser Carnes rojas o blancas cocidas, Croquetas o medallones de pollo o pizza. pueden durar aproximadamente de 3 a 4 días si tienen una temperatura de 40°f o menos.
Congelación:
Por ejemplo: Carne fresca de res, ternera, cordero y cerdo, tipo filetes chuletas y carnes asadas. Puede durar De 4 a 12 meses en el congelador con temperaturas de 0 °F o menos.
Otro ejemplo podría ser el jamón. Fresco, sin curar, crudo. Puede durar en el congelador 6 Meses con temperaturas De 0°F o menos.
Ultracongelación:
los panificados, las carnes, los pescados, los mariscos, los vegetales y las comidas preparadas.
Técnicas por calor: Pasteurización, Esterilización y Uperización.
Pasteurización:
Cremas, helados, cervezas, vinos, quesos, mieles, zumos de frutas y verduras o productos lácteos en general. De este modo, muchos alimentos, sobre todo bebidas, se pasteurizan: la leche es el ejemplo más clásico.
Esterilización:
Carnes, pescados, verduras y frutas. En mermeladas, almíbares, escabeche, cremas, sopas, salsas y guisados entre otros.
Uperización:
un ejemplo de este podría ser la leche, pero el proceso también puede ser aplicado a zumos de frutas, cremas, sopas y guisos. Y puede durar de seis a nueve meses. Con una temperatura de al menos 138 ºC.