es una forma de comercio en que las mercancías se compran y se almacenan en grandes cantidades y se vende en lotes de una cantidad designada, a los revendedores, usuarios o grupos profesionales, pero no a los consumidores finales.
Caracterizado por ser un negocio pequeño de origen familiar, se basa en la venta en menudeo o detallista es la empresa comercial o persona en régimen de autónomo que vende productos al consumidor final.
El comercio interno que es el que nos ocupa en esta reseña, también denominado como comercio interior, es aquel comercio que se concreta entre comerciantes e individuos que viven en la misma nación y entonces se encuentra bajo las mismas reglas comerciales.
El comercio exterior es la compra o venta de bienes y servicios que se realiza fuera de las fronteras geográficas de un país (en el exterior). Esto es, las partes interesadas en transar productos se encuentran ubicadas en distintos países o regiones.
Aquí hacemos mención al comercio cuyos productos se transportan por tierra en camiones o trenes dependiendo de las distancias.
En este caso, los productos se transportan en barco por océanos y ríos de gran caudal. Es muy útil para comerciar de un continente a otro, pues se pueden enviar grandes volúmenes de mercancía.
El comercio aéreo hace referencia a todas aquellas mercancías que se transportan por avión de un país a otro.
Se trata del tipo de comercio en el que la persona ofrece, por su propia cuenta, bienes o servicios utilizando o un local o los e-commerce de Internet.
En este caso, el comerciante vende artículos que fabrica otra persona y cobra una comisión por cada transacción realizada favorablemente.
Es, quizá, el tipo de comercio que más fuerza ganó de un tiempo a esta parte. Las transacciones se hacen por Internet y se ofrecen desde bienes como autos, casas, ropa y alimentos hasta servicios, pues se puede abonar la luz, el gas, cargar los teléfonos celulares con dinero e inclusive comprar entradas para diferentes espectáculos y salas de cine.