METODOS EN LA ANTROPOLOGÍA FILOSÓFICA
Objeto de la Antropología Filosófica
El estudio de los seres humanos en general, sin considerar inicialmente lo que distingue a unos de otros.
el estudio debe de ser:
Reflexivamente el mayor número de elementos y dimensiones que componen la realidad humana: corporalidad, cultura, sociabilidad, lenguaje, capacidades funcionales de todo tipo, dimensiones ética, estética y religiosa,etc.
Para estudiar al ser humano, la Antropología Filosófica necesita integrar los conocimientos que proporcionan la Antropología Física, la Antropología Psicológica y la Antropología Sociocultural.
Conocimiento del ser humano
El ser humano dispone de tres instancias que le permiten conocer el mundo y reconocerse a sí mismo.
Conocimiento espontáneo
Ofrece las primeras respuestas a la curiosidad natural del ser humano y a su apertura intencional a la totalidad de lo real
conocimiento científico
Aristóteles definió como el saber sistemático y ordenado de la realidad por sus causas—, proporciona además abundante información sobre la composición material del organismo humano desde las perspectivas física, química, biológica, genética, funcional,
conocimiento y experiencias humanas
La propia intimidad. La capacidad de reflexión, de examinar las propias acciones, intensiones, deseos, aspiraciones, frustraciones y esperanzas más íntimas
Naturaleza humana
Los temas centrales de los que se ha ocupado la Antropología Filosófica a lo largo de los siglos ha sido la cuestión de la “naturaleza humana” es decir, la indagación acerca de si existen algunas características que son compartidas por todos los seres humanos.
principales respuestas filosóficas a la cuestión sobre la naturaleza humana en cuatro grandes categorías:
Esencialismo intelectualista
Considera al ser humano como un “animal racional”. Se afirma que existe un conjunto de rasgos que definen y distinguen a los seres humanos: el más exclusivo y superior a todos ellos es la razón o capacidad de pensamiento abstracto.
Existencialismo, Determinismo e Historicismo
Sostienen que no existe un conjunto de características compartidas y estables que definan al hombre, por lo que no es posible hablar de una “naturaleza humana” común a todos.
Pensamiento ideológico.
El solo hecho de preguntarse por la naturaleza humana y tratar de ofrecer una respuesta, es un síntoma claro de razonamiento ideológico: es decir, de la imposición de un sistema de pensamiento para perpetuar alguna forma de poder
Esencialismo vitalista
Concibe al ser humano como un “animal de impulsos”. Se considera que el conjunto de rasgos que definen y distinguen a los seres humanos se identifican y reducen a las características biológicas de la especie.
Hermenéutica
tiene un largo recorrido vinculado a la interpretación de textos religiosos, literarios, históricos y jurídicos.
En la primera mitad del siglo XIX, Friedrich Schleiermacher, a pesar de ser teólogo de profesión, elabora una teoría general de la comprensión independiente de la teología y de otros ámbitos específicos de aplicación.
Inspirado en Schleiermacher, Guillermo Dilthey desarrolla, en el siglo siguiente, una hermenéutica filosófica, que se propone aportar el fundamento gnoseológico a las ciencias del espíritu.
La pregunta por el sentido del ser
Heidegger vuelve a plantear la pregunta por el sentido del ser, y sostiene que la filosofía no puede lanzarse a ciegas sobre el ser, olvidando las condiciones bajo las cuales su sentido es buscado y podría ser hallado.
Heidegger no puede estar de acuerdo con la reducción histórica que plantea Husserl para el método fenomenológico. Según Husserl, debemos contemplar las cosas con una mirada neutral, sin una predisposición determinada.
Heidegger considera, por el contrario, que poner entre paréntesis la historia, solo sirve para encubrir los prejuicios operantes en toda descripción que se vale de conceptos. Todos los conceptos están saturados de tradición y de teoría.
Para tener una relación libre con la historia es necesario realizar una "destrucción" fenomenológica de la ontología.
Consolidación de la Filosofía Hermenéutica
Gadamer fue alumno de Heidegger a partir de 1923 en Marburgo. Al igual que su maestro, no concibe la comprensión como un sistema de reglas orientadas a la recta comprensión de cierto tipo de fenómenos, sino como una reflexión sobre lo que acontece con el hombre cuando efectivamente comprende.
Gadamer se aparta de Heidegger al hacer de la reflexión sobre los fundamentos de las ciencias del espíritu un tema central de su filosofía, al que dedicó lecciones universitarias entre 1936 y 1959, las que desembocaron en Verdad y Método.
Principales inspiraciones al respecto la recibe del naturalista Herrmann Helmholtz, quien en un discurso de 1862 sobre la relación entre las ciencias naturales y las ciencias del espíritu.
Recurren más bien a un cierto tacto psicológico vinculado a la memoria y a la autoridad.
tratar de poner al descubierto las condiciones que hacen posible la autocomprensión del hombre en las distintas esferas de su experiencia de la verdad.