La inmigración es uno de las principales temáticas de intervención de la educación social, al ser las personas inmigrantes un colectivo enormemente estigmatizado en nuestra sociedad, y sobre el que hay que hacer una doble actuación, tanto educativa y económica, aportándole los recursos para que puedan desenvolverse en la sociedad, como de concienciación, para que el entorno en el que se integren les aporte en todas las fases de su vida en el país.
Al igual que la inmigración, un colectivo esencial para la actuación de los educadores sociales son las personas drogodependientes. Debido a que debido a su situación, necesitan de nuestra ayuda para volver a ser partícipes de una vida plena, completa y consciente.
Los mejores son el futuro de la sociedad, el devenir del mundo en los próximos años, por lo que su correcto desarrollo es casi una obligación de la sociedad. Como educadores sociales, debemos hacer un doble ejercicio, de guía, para aportarles las herramientas con las que sean libres de elegir el camino que quieren tomar, y de protección, para asegurarnos que nada se interponga en ese proceso de crecimiento y desarrollo del que son protagonistas.