RACIMO ASOCIATIVO
Método para recoger ideas que pone de manifiesto mediante una representación gráfica
las asociaciones entre las ideas, permite la generación de un gran número de elementos.
Los errores más comunes
Relacionar ideas sin que exista entre ellas un vínculo asociativo.
Una información que no puede asociarse con ninguno
de los elementos incluidos ya en el racimo debe colocarse
en la primera línea radial, aliado del problema central.
Disponer pocas ideas en el primer nivel
Es posible enriquecer el primer nivel con
nuevas ideas cuando se han desarrollado ya en parte los niveles
siguientes.
Realizar pocos niveles
Es útil, ampliar el número de las asociaciones añadiendo diversas
irradiaciones sucesivas, a fin de desarrollar las informaciones e intuiciones iniciales"
Cómo se construye
Se necesita un folio de gran tamaño.
En el centro se escribe el tema del racimo; a su alrededor, se apuntan todas las ideas sobre el tema. Cuando ya no sepamos qué más decir, releeremos las ideas ya escritas y probaremos
a añadir a cada una de ellas una nueva idea asociada.
Así crearemos una segunda estructura radial y luego una tercera, sucesivamente: sólo nos detendremos cuando hayamos
cubierto todo el papel disponible o bien cuando consideremos que ya hemos reunido un número suficiente de ideas.
La técnica del racimo asociativo permite crear estructuras gráficas: por ejemplo, se suele enmarcar cada idea en figuras geométricas, en bocadillos de cómic,etc.
Descripción
El primer participante dice una palabra, por ejemplo «sol»;
el segundo responde con una palabra relacionada con la primera,
como «luna», «calor» o «luz»; el primero, a su vez,
replica con una nueva palabra relacionada con la anterior, y
así sucesivamente.
El empleo de la asociación impulsa a buscar relaciones
lógicas y a traer a la memoria informaciones útiles que ya poseíamos.